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Tras una semana con el Samsung 48S93D, nos encontramos con un OLED 4K de 48 pulgadas que pone el foco en brillo y contraste. Los negros son profundos y los picos de luz aportan chispa al HDR sin quemar detalles. El sonido sorprende por su cuerpo y escena, suficiente para sesiones de cine sin barra, aunque aún gana con un sub externo. Como Smart TV, la interfaz es ágil y el catálogo de apps, completo. Donde más brilla es en juegos: Motion Xcelerator 144 Hz entrega movimientos fluidos y baja latencia. No es el más grande, pero sí un equilibrio sólido para salones medianos.
Acabamos de pasar varios días con el Samsung TV OLED 4K 2024 48S93D, un televisor de 48 pulgadas que promete combinar lo mejor del OLED con un golpe extra de brillo, un contraste profundo y un sonido con vocación de cine. Desde el primer encendido nos llamó la atención la forma en que HDR10+ Adaptive/Gaming, el potenciador de brillo y la tecnología Quantum Dot trabajan juntos: las escenas oscuras mantienen detalle sin lavar los negros y los colores se ven plenos incluso con luz ambiente.
En el apartado sonoro, nos interesaba especialmente comprobar el efecto de Dolby Atmos y el seguimiento de objetos de OTS Lite. Nuestra experiencia inicial apunta a un sonido más envolvente de lo habitual en un televisor fino, con buena direccionalidad para películas y series, y la opción de Q‑Symphony como extra a considerar si ya convivís con una barra compatible.
Donde más curiosidad teníamos era en juego: 4K a 144 Hz, HDMI 2.1, Game Motion Plus y MEMC suenan a receta para sesiones fluidas. Tras varias partidas rápidas, la combinación de respuesta y suavidad nos dejó buenas sensaciones, sin cortes apreciables. Y, como Smart TV, entre Samsung TV Plus (con más de 100 canales gratuitos), Gaming Hub y la integración con SmartThings, la propuesta es amplia y cómoda para el día a día.
En esta review os contamos qué tal rinde en brillo real, cómo se comporta en cine y gaming, y si su plataforma y funciones inteligentes están a la altura de lo que promete.
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Al encenderlo por primera vez, lo que nos sorprendió fue cómo combina el tamaño de 48 pulgadas con una imagen que llena la sala sin esfuerzo. En escenas oscuras, el nivel de negro y el contraste resaltan gracias a HDR10+ Adaptive/Gaming y al potenciador de brillo en OLED; los colores, impulsados por Quantum Dot, se ven vivos sin saturar. Incluso con luz ambiente, el extra de brillo ayuda a mantener detalle y volumen de color. Para un uso cotidiano, entramos directo a Samsung TV Plus y ya teníamos más de 100 canales gratuitos sin descargas, ideal para descubrir contenido nada más sacarlo de la caja.
En nuestro día a día lo concebimos como un centro de entretenimiento versátil: películas con Dolby Atmos y OTS Lite para un sonido dimensional, y, si añadimos una barra compatible, Q-Symphony suma potencia sin perder direccionalidad. Para jugar, el modo a 4K 144Hz con HDMI 2.1, Game Motion Plus y MEMC mantiene la acción fluida y sin tirones. Además, con Gaming Hub es posible acceder a juegos en la nube, y con SmartThings usamos el televisor como mando de control para el hogar, integrando dispositivos en segundos.
Escenario | Cómo sacarle partido |
---|---|
Cine nocturno | HDR10+ Adaptive + potenciador de brillo |
Juegos competitivos | Motion Xcelerator 144Hz + Game Motion Plus |
Series y zapping | Samsung TV Plus sin suscripciones |
Casa conectada | SmartThings como panel de control |
Audio inmersivo | Dolby Atmos + Q-Symphony con barra compatible |
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El panel OLED aquí brilla -literal y figuradamente- con negros profundos y un contraste prácticamente infinito que sostiene cada plano. Gracias a HDR10+ Adaptive/Gaming, el televisor ajusta el mapeo de tonos en tiempo real según la iluminación de la sala, mientras el OLED potenciador de brillo eleva los destellos especulares sin lavar los negros. La Tecnología Quantum Dot aporta una paleta amplia y saturada que no cae en artificios: pieles naturales, cielos con gradaciones suaves y luces de neón vibrantes, como las vemos en nuestras películas y series favoritas.
Escenario | Ajuste sugerido |
Películas en sala oscura | HDR10+ Adaptive activado, brillo moderado-alto, MEMC desactivado |
Series con luz ambiente | HDR10+ Adaptive activado, brillo alto, Game Motion Plus desactivado |
En la práctica, los episodios oscuros mantienen textura en negro sin «efecto velo», y las escenas con luces urbanas o soles a contraluz conservan detalle fino gracias al control de highlights. El resultado es un HDR balanceado que potencia la intención cinematográfica sin clipping ni saturación excesiva: colores vivos cuando toca, tonos discretos cuando la historia lo pide. Si a ello sumamos que la plataforma optimiza el color y el contraste en tiempo real, obtenemos una imagen que se siente estable tanto en maratones de series como en cine de autor.
El apartado de sonido nos sorprendió por su enfoque cinematográfico: la escena es amplia y coherente, con efectos que «respiran» a nuestro alrededor gracias a Dolby Atmos y al posicionamiento de OTS Lite. Las voces mantienen presencia incluso en escenas complejas, y al combinarlo con Q-Symphony junto a una barra compatible se gana cuerpo sin perder detalle. En películas y series, la espacialidad es convincente y no hace falta subir el volumen para apreciar matices, mientras que en conciertos la amplitud del escenario sonoro mantiene una separación instrumental muy agradable.
En calibración, lo que mejores resultados nos dio fue activar HDR10+ Adaptive para cine y streaming, y HDR10+ Gaming en juegos; así, el brillo y el contraste (apoyados por OLED potenciador de brillo y Quantum dot) potencian la inmersión del audio al revelar detalles finos que el sonido acompaña con precisión. Para sonido, recomendamos mantener Dolby Atmos activo, OTS Lite en su nivel más perceptible y emplear Q-Symphony cuando usemos barra compatible; en juegos, con 4K 144Hz, HDMI 2.1 y Game Motion Plus/MEMC, la direccionalidad de pasos y disparos se siente más definida gracias a la estabilidad de imagen y al seguimiento sonoro.
Uso | HDR | Audio | Resultado |
---|---|---|---|
Cine | HDR10+ Adaptive | Dolby Atmos + OTS Lite | Envolvente y diálogos claros |
Juegos | HDR10+ Gaming (4K 144Hz) | Dolby Atmos; Q‑Symphony opcional | Precisión espacial y efectos nítidos |
Series nocturnas | HDR10+ Adaptive | OTS Lite priorizando voz | Comprensión del diálogo sin fatiga |
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Para jugar a 4K y 144 Hz con una sensación de fluidez real, este panel OLED de 48″ se apoya en Motion Xcelerator 144Hz, HDMI 2.1 y los algoritmos Game Motion Plus y MEMC. El resultado son movimientos nítidos, transiciones sin cortes y una respuesta que se siente inmediata, incluso en shooters competitivos o carreras a máxima velocidad. Además, el combo HDR10+ Adaptive/Gaming, el potenciador de brillo OLED y la Tecnología Quantum Dot nos dan negros profundos y colores intensos sin quemar los highlights, ideal para detectar enemigos en sombras o leer pistas de luz en mapas nocturnos.
Ajuste | Beneficio en juego |
---|---|
4K 144Hz (HDMI 2.1) | Movimiento ultra fluido |
HDR10+ Gaming | Mejor lectura de sombras |
Game Motion Plus | Estabilidad de frames |
MEMC | Menos stutter |
Gaming Hub | Juego en la nube al instante |
El ecosistema remata la experiencia: con Gaming Hub jugamos en la nube sin consola, mientras que el audio con Dolby Atmos, Q-Symphony y OTS Lite aporta posicionamiento espacial para reaccionar antes y mejor. Sumamos la plataforma Smart TV con más de 100 canales en Samsung TV Plus y control del hogar vía SmartThings para tenerlo todo a mano entre partidas. En conjunto, se siente un televisor afinado para competir: alta tasa de refresco, bajo tiempo de respuesta percibido y una imagen que se mantiene limpia en cada giro de cámara.
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Nuestra recomendación: lo vemos redondo si buscas negros profundos con más brillo y contraste, una experiencia de cine en casa y un ecosistema smart completo. HDR10+ Adaptive/Gaming, el potenciador de brillo en panel OLED y la Tecnología Quantum Dot elevan el detalle en sombras y las luces especulares; en sonido, Dolby Atmos con OTS Lite crea una escena amplia y con Q‑Symphony podrás sumar la potencia de una barra compatible. Para jugar, su 4K a 144Hz con HDMI 2.1, Game Motion Plus y MEMC mantiene la acción suave y sin tirones. Además, Samsung TV Plus regala más de 100 canales y el Gaming Hub acerca el juego en la nube, mientras SmartThings convierte el televisor en el centro de control del hogar.
Perfil | Por qué encaja |
Gamer competitivo | 4K 144Hz + HDMI 2.1 + Game Motion Plus |
Cinéfilo | OLED con brillo potenciado, HDR10+ y Atmos |
Smart home | Control central con SmartThings |
Ajustes iniciales recomendados: en Imagen, activa HDR10+ Adaptive para que el panel ajuste el mapeo de tonos según la luz ambiente y aprovecha el potenciador de brillo cuando veas cine o deportes con mucha luminancia. Si juegas, entra en el panel de juego para forzar 4K a 144Hz, conecta la consola en un puerto HDMI 2.1 y ajusta Game Motion Plus a tu gusto; fuera de juegos, reduce la interpolación (MEMC) para mantener la intención cinematográfica. En Sonido, selecciona Dolby Atmos, activa OTS Lite y, si tienes barra compatible, habilita Q‑Symphony. Completa la experiencia iniciando sesión en SmartThings, ordenando tus favoritos en Samsung TV Plus y vinculando servicios en Gaming Hub.
Área | Ajuste rápido |
HDR | HDR10+ Adaptive activado |
Juegos | 4K 144Hz + Game Motion Plus |
Movimiento | MEMC bajo para cine |
Sonido | Dolby Atmos + Q‑Symphony |
Smart | SmartThings, TV Plus y Gaming Hub |
Después de convivir con el Samsung 48S93D, nos quedamos con la sensación de que es un televisor pensado para dos mundos y resuelve ambos con solvencia: cine en casa y juego competitivo. El combo de OLED con potenciador de brillo, Quantum Dot y HDR10+ Adaptive/Gaming entrega negros profundos con picos de brillo que realzan el detalle sin quemar los colores. En juegos, el 4K a 144Hz con HDMI 2.1, Game Motion Plus y MEMC mantiene la acción nítida y fluida; y el sonido con Dolby Atmos, OTS Lite y Q‑Symphony acompaña con una escena amplia que no desentona.
En el día a día, la parte «smart» suma puntos: Samsung TV Plus con más de 100 canales gratuitos para zappear sin suscripciones, Gaming Hub para jugar en la nube, y la integración con SmartThings para usar la tele como centro de control del hogar. Como pegas, sus 48″ pueden quedarse cortas en salones muy grandes y, como cualquier OLED, conviene ser sensatos con contenidos estáticos prolongados; nada que empañe un conjunto muy redondo para su tamaño.
Si buscábamos un 48″ premium para maratones de cine, partidas a 144Hz y una experiencia smart completa, el 48S93D se ha ganado un lugar en nuestra lista corta. ¿El siguiente paso? Comprobar su precio y disponibilidad.
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